Cuaderno de Viaje Londres

Quisiera empezar pidiendo disculpas a Londres, ¿se le pueden pedir disculpas a una ciudad? porque desde que estuve hace casi 10 años andaba yo diciendo a distintas amistades que no me entusiasmaba. Así que rectifico porque todos cometemos errores, es por lo que los lapices llevan goma de borrar.

También empezar con una afirmación, “quien fue amig@ lo es para siempre”, porque uno puede pasarse diez años sin ver a una amiga, dices en Facebook que vas a Londres y ofrecerte su casa y ofrecerte un día entero para hacerte soñar que eres un Lodoneer. Gracias Eva.

Una sola palabra no define una ciudad pero tras pasearla a mi Londres me deja una, “Metrópoli” que según el diccionario es una “Ciudad principal, cabeza de la provincia o Estado”, pero si cierro los ojos y pienso en que es una Metrópoli me vienen juntas a la imaginación Nueva York y Londres, no muchas mas, comparten una multiculturalidad rebosante y feliz en su escaparate, transmiten juventud y empuje y la sensación de que las cosas pasan allí y que al no estar te estas perdiendo algo.

Londres es… Londres son…

sus calles… mi preferida sin dudarlo Regent Street bella y única, su curva elegante vista desde Picadilly es sublime de noche, se la puede pasear disfrutando con la mirada alta sintiendo como gira lentamente al ritmo de tus pasos o ir visitando sus tiendas… mejor caminarla dos veces. Cerca están las Bond Street, la New y la Old, llenas de tiendas inaccesibles a los bolsillos de la mayoría, tiendas donde los mirones sin recursos no nos atrevemos a entrar. Lo mas extravagante que vi allí fue un maletín de lujo que contenía los distintos tipos de adaptadores para enchufes de medio mundo, para ejecutivos viajeros de la City. No me gusta Oxford Street demasiada gente y las tiendas puedes encontrarlas parecidas en cualquier ciudad del mundo, bueno salvo GAP y FCUK. Muy concurrida pero indispensable esta Whitehall que se convierte en Parlament, lleva de Trafalgar hasta el Parlament Sq, donde esta el famoso Big Ben, lo mejor de la calle es salirse en las Horse Guards que te conducen hasta el St James Park, allí nos sentamos en el primer banco donde mirando hacia adelante se disfruta de la vista de un bonito lago y mirando atrás deja una vista magnifica de tejados de las casas colindantes. Kings Road en Chelsea es glamourosa, como sus tiendas y sus casas bajas de elegante blanco, entre muchas tiendas de ropa encontré sin esperarlo una tienda de libros Taschen, un verdadero placer visual. Mi calle de este viaje sin embargo ha sido Charing Cross llena de librerías, muchas de ellas de segunda mano, una tarde entera seria necesaria para saborearla así que el siguiente viaje me llevare una maleta solo para libros.

sus transportes… en este tema lo primero es desistir en entender su sistema de precios, compra la Oyster Card, precio máximo diario 5€, no preguntes mas, perderás el tiempo. Puedes usar el Metro, sorprende que haya carteles que indican que si no te encuentras bien no montes, el calor es considerable, por otro lado el ingeniero que lo construyo fue practico pues la electricidad va junto a los raíles así que los vagones son de casi el mismo tamaño que el túnel y muy importante Mind the Gap. Si vas con tiempo mejor toma el autobús, esos que todos conocemos, rojos y de dos alturas, porque? muy fácil va por la superficie y permite ir viendo la cuidad, obviamente sentarse lo mas cerca de de la primera fila de la planta superior, el enorme cristal permite turismo en alta definición, el numero 88 salia cerca de la casa de Eva y su recorrido era una delicia. Para navegar el Tamesis nosotros tomamos el ferry a Canary Wharf desde el London Eye, que atardeciendo lo hace mas espectacular y permite unas magnificas vistas, pasando por el Tate Modern un icono de la modernidad, el Tower Bridge, la Torre de Londres y muchos bares a la orilla del rio.

sus plazas.. y ahí sin duda Picadilly es la mas famosa si bien no siendo Times Sq deslumbran los carteles porque yo soy mas de los carteles luminosos que de la famosa estatua de Eros que hay en ella. En Trafalgar amplia y majestuosa el amigo Nelson esta allá arriba idolatrado pues es común a toda nación honrar a los que dan la vida por ella, así que no esperes una estatua si no mueres por tu patria, que no cuenten conmigo.

sus parques.. que los hay y muchos, un día agotados tras los paseos nos quedamos dormidos en Green Park en el suelo por supuesto que las tumbonas estaban a 5 libras la hora, el capitalismo te quiere cobrar hasta por descansar, otro día apenas estuvimos 30 minutos en Hyde Park, la lluvia nos lo impidió algo muy común en Londres, es un parque que si lo miras dejando atrás Marbel Arch es lo suficientemente grande como para hacerte olvidar la ciudad que dejas detrás. Curiosos los parques privados, cuidados de forma exquisita donde solo podrían entran los “poseedores de la llave” de la puerta que así rezaban los letreros, bueno y si estuviesen en España cualquier listillo pues las verjas no eran precisamente altas.

sus restaurantes.. parece muy extendida la opción del “Dinning Out” por los londinenses lo que hace que haya bastante ambiente entre semana, curioso porque uno no tiene a los ingleses por sibaritas del comer, bueno y quizás solo los londinenses lo sean y a Jamie Oliver aun le falten muchos paladares por educar en el resto del país, pero cuidado Londres posee 48 estrella Michelín y en Europa solo esta por detrás de París, si tu cartera te lo permite pues puedes disfrutar de las estrellas pero sino a lo largo de toda la ciudad hay restaurantes de aspecto cuidado y buena presentación, con predominancia de la cocina Panasicatica, y ademas la relación calidad-precio es excelente, por 20 € por persona se puede cenar tranquilamente. Eva nos descubrió para comer una joya Malaya dentro del hotel Sanderson, un lujo del diseño donde pudimos comer en un tranquilo patio interior una buena degustacion.

su vida social.. la primera impresión es que a las 5 la gente sale de la oficina y se va a tomar algo, a las 5 en España aun nos quedan unas horas para salir del trabajo. A nada que el sol lo permite y para ello no hace falta mas de 15 grados se reúnen en las terrazas a tomar cervezas y vinos lo cual le da un aire elegante al llevar sus trajes de faena capitalista, solo ensombrecido porque las botellas de vino son de tapón de rosca. Los bares del centro son elegantes y de cuidado diseño. Pero lo mas cool del viaje fueron la jarra de Pimms que nos tomamos en la azotea de un rascacielos de la City, en Le Coq D’argent en el que pudimos subir porque el portero estaría en el baño, nos sentamos rodeados de trajeados donde quizás alguno bebía celebrando como había ganando dinero especulando contra bonos españoles o para que subiese el trigo, los pequeños hijos de puta soldados del capitalismo que habitan en la City y en Lower Manhattan, bueno a lo mejor solo eran unos currantes tomándose una copa. En el multicultural barrio de Brixton en la Effra Hall Tavern bebimos disfrutando de un concierto de jazz gratuito que sonaba deliciosamente y sentaba aun mejor estando rodeado de amigos. El ultimo día nos fuimos al muy cool barrio de Nothing Hill a ver a Luis y cuando animados por su siempre inteligente y rápida dialéctica llegaron las 12 y cerraron el bar, nos quedamos como a medias, quizás los ingleses sean como los Gremlins, si beben después de las 12 se convierten en enloquecidos, debe de ser por lo que los mandan a España, para que disfruten borrachos hasta las seis de la mañana.

Londres es una de esas ciudades que te susurran al oído que tienes que volver. Un trabajador del British Museum nos dijo que en ocho años de trabajo allí todavía no lo conocía en su totalidad, así parece ser Londres como el British, siempre tiene algo que ofrecer, a quien vive allí y al visitante que tendrá que ir varias veces para ir descubriendolo a pequeños paseos.

En el avión de vuelta entrando ya en Madrid de noche con la sonrisa de la experiencia vivida y la satisfacción de disfrutar los momentos que la vida nos da, gire la cabeza hacia la ventanilla, allí abajo en un pueblo de las afueras estaban lanzando fuegos artificiales. Verlo desde la altura es un espectáculo delicioso, no se me ocurre mejor broche para este viaje.